16 de agosto de 2014

Reconocimiento

Llega ése momento
en que todo sentimiento
busca liberarse,
En un desarmarse.

Meditas que de pronto, 
la tinta empieza a desaparecer, 
las manos se descontrolan, 
buscas un método nuevo y eficaz,
un método para los sentimientos que se fugan.  

Empiezas a despedir de tu cuerpo, 
fragilidad, a perder la cordura 
a caer en la mejor de las coherencias... La locura. 

Y de pronto...
Empieza a brillar en ti ése destello,
tranquilidad después de desgastar
el recuerdo con la tinta,
que tiene como fin reconocerte a ti mismo.

Tu propia melodía,
comienza a tener ritmo con los latidos, 
con los pensamientos, 
empieza esa paz... 

Todo está a tiempo,
en su lugar, en tu cuerpo, 

en tu mente...
La inspiración empieza a correr en tu dedo pulgar, 
tus manos ya no se pueden controlar... 
Lo descubres, te descubres y renaces de las cenizas, como el ave fénix.

La frecuencia de tus latidos,
empieza a danzar con las memorias, 
la energía empieza a fluir
con el camino hacia tus sonrisas

Te haz encontrado.